Sin duda alguna esta sala, donde se alojan el Nacimiento de Venus y la Primavera de Botticelli es una de las más visitadas de tod la Galería de los Uffizi.
Estas pinturas, no sólo son el testimonio de la atmósfera refinada en la que Florencia estaba viviendo en el momento en que Botticelli las realizó (alrededor de 1482-1484), además, la delicada belleza de las figuras femeninas representadas, sobre todo Venus, sin duda han tomado el valor de icono de la belleza femenina.
La sala alberga también otras maravillosas pinturas de Botticelli, incluyendo la Adoración de los Magos, en la que podemos reconocer los retratos de algunos miembros de la familia Medici ¡y también el auto-retrato de Botticelli!
Otra enorme pintura presente en la sala es el Tríptico Portinari del pintor flamenco Hugo van der Goes. ¡Qué increíble diferencia con respecto al estilo distintivo de Botticelli!
Van der Goes lo ha pintado en Bruges alrededor de 1474 para el banquero florentino Tommaso Portinari y cuando la pintura llegó a Florencia en 1483 hizo un fuerte impacto en los artistas florentinos.