Andrea di Cione

Nacido en Florencia, Andrea di Michele di Francesco de' Cioni muy joven hizo una serie de trabajos ocasionales, incluyendo la artesanía de azulejos y ladrillos, e incluso el recaudador de impuestos. Sus habilidades artísticas no eran inferiores, como se le conoce como pintor, orfebre, perspectivista, diseñador, escultor, tallista y músico. A pesar de esto, hay mucho por conocer acerca de este importante artista, porque nos ha quedado sólo una pintura firmada. Entonces, si ha sido realmente todo lo que se reporta de él, o incluso algo más, sigue siendo sólo una hipótesis histórica.

Andrea tomó el apodo de Verrocchio después de un aprendizaje con el orfebre Giuliano Verrocchi. Su presencia artística se hizo conocida cuando llegó bajo el patrocinio de la corte de los Medici en Florencia. Esto ocurrió después de la muerte del artista de corte Donatello, en 1466. Se dijo que Verrocchio fue su aprendiz, aunque sus primeros intentos en pintura no son anteriores a los años Sesenta del siglo XV, en Prato, con Filippo Lippi (1406-1469) y otro pintor florentino, Alessio Baldovinetti.

Es posible que él haya empezado a pintar con Lippi, trabajando junto a Sandro Botticelli (1444-1510) en una serie de frescos para la catedral de Prato. Entre 1465 y 1467 realizó algunas esculturas, entre las cuales el monumento de Cosimo de' Medici y luego, en 1472, y los de Piero y Giovanni de' Medici en la Sacristía Vieja en san Lorenzo. Piero de' Medici y su hijo Lorenzo fueron patronos de Verrocchio y el artista se convirtió en curador de la colección de antigüedades romanas de la corte. Él diseñó trajes y armaduras para fiestas, torneos y banquetes de la corte de los Medici. Verrocchio trabajó también para el estado veneciano y el consejo de la ciudad de Pistoia. Fue encargado, como escultor del bronce, por el Tribunal de la Mercancía, o corporación de los comerciantes, de realizar un grupo de estatuas titulado Incredulidad de san Tommaso para la iglesia de Orsanmichele. La obra reemplazó el San Ludovico de Tolosa de Donatello, en el exterior de la iglesia. Su candelabro, hecho para el ayuntamiento florentino en 1468 ahora está expuesto en Amsterdam.

Maestro de muchos alumnos ilustres, Verrocchio tuvo bajo su protección Pietro Perugino (1446-1524), Domenico Ghirlandaio (1449-1494), Sandro Botticelli y su famoso discípulo, Leonardo da Vinci. El famoso Bautismo de Cristo fue realizado entre 1474 y 1475 por Verrocchio y Leonardo. En la pintura, Leonardo completó el fondo y uno de los ángeles, cuya belleza sorprendió el Verrocchio así que le hizo declarar que nunca volvería a tocar un pincel. Durante el mismo período Verrocchio pintó la Virgen con el Niño en trono con Santos, completada por otro alumno, Lorenzo di Credi, en la catedral de Pistoia. Probablemente no hay otras pinturas de Verrocchio, que en sus últimos años se concentró en la escultura, y se considera que su talento haya alcanzado su pico en sus últimos veinte años de vida. Su obra más ambiciosa, una estatua ecuestre de Bartolomeo Colleoni, fue dejada inconclusa a la muerte y fue terminada por Alessandro Leopardi, pero todavía es el proyecto realmente innovador de Verrocchio.