El artista florentino Boscoli, al ser un cosmopolita, acumuló numerosas influencias y contactos sociales, que luego llevaron a su influencia en los artistas después de él. Fue descrito como una personalidad vivaz, casi extraña, con un profundo amor por el arte, la astrología, la música y la poesía. Inició su aprendizaje bajo el pintor manierista Santi di Tito (1536-1602) y fue miembro de la Academia florentina de Diseño, a la cual se unió en 1583.
Su formación tuvo lugar durante una reforma del estilo manierista, que se abrió a un mayor naturalismo. Andrea Boscoli desarrolló su propia estética dentro de la reforma, con atención a los detalles y dando vitalidad a la representación de sus sujetos. Este su estilo definitivo siguió de cerca su influencia permanente, a pesar de los viajes y la conciencia del mundo del arte.
Además de la amplitud de sus conexiones con artistas italianos, su estancia en Roma le llevó a relacionarse con artistas del Norte de los Alpes. Durante este período fue influenciado también por el trabajo del pintor florentino Jacopo Zucchi (1541-1590), que había estudiado bajo Giorgio Vasari (1511-1574). Boscoli se relacionó también con un artista muy competente del mundo del arte de aquel tiempo, Federico Zuccari (1542 - 1609), que como Vasari fue crítico e historiador de la pintura italiana.
Boscoli pintó los frescos de la Capilla de la Célula para el escultor Giovanni Angelo Montorsoli, en el convento de los Siervos de Maria en Roma. En 1592 trabajó en unos frescos de tema mitológico en la Villa de la Seda en Pisa, una de las obras que sigue mostrando un fuerte uso de luz y sombra. Hizo una serie de dibujos de la Pasión, que fueron convertidos en grabados y también pintó retablos por todas partes en Florencia. Realizó también algunos trabajos encargados por privados, que sin embargo no eran profanos en comparación con su trabajo en las ciudades.
Siete años antes de su muerte, Boscoli seguía siendo muy activo en la pintura de frescos y retablos. Estos trabajos dieron origen a un retorno del estilo manierista en su arte con proporciones y formas expresivas, una especie de alejarse de su formación profundamente naturalista. Murió en Roma poco después de 1606 o 1607.