Pintor y grabador alemán, nacido en Ratisbona, sus obras muestran sujetos sobre todo religiosos, pero también sientan las bases para el desarrollo de la pintura de paisaje. Su trabajo está estrechamente alineado con el de la escuela del Danubio, de artistas austriacos y bávaros. Estos pintores e impresores innovadores, incluyendo Wolf Huber, Jorg Breu, Rueland Freuauf y Lucas Cranach, fueron los primeros en pintar paisajes puros y sin seres humanos. El trabajo de Altdorf, Paisaje con un puente (1517-1520), es considerado el primer paisaje al óleo, hecho con un estilo que se inspira en Cranach.
En la reproducción de los bosques de Alemania y Austria, Albrecht Altdorfer fue también uno de los primeros pintores almanes en infundir puestas de sole y luces nocturnas. Sus expresivas obras religiosas reproducen también la luz de las antorchas, de las estrellas y de los crepúsculos. Incluso algunas pinturas que muestran sujetos humanos están dominados por el paisaje alrededor, como el caballero rodeado por un bosque primitivo, en su San Giorgio en el bosque (1510).
Su obra maestra, Batalla de Alessandro y Dario en Issos (1529) utiliza la misma técnica, con los ejércitos en primer plano, dominados por un dramático paisaje. La obra representa una visión catastrófica de la guerra, y era la cumbre de su trabajo anterior, con muchas miniaturas de escenas de batallas, realizadas para el manuscrito de la Procesión triunfal (1512-1514). Sus obras religiosas más profundas representan Cristo y la Virgen, como Resurreción de Cristo (1518) y Crucifixión (1520). Aquellas dedicadas a la Pasión de Cristo y al martirio de san Sebastiano se encuentran en los retablos para la iglesia de san Floriano, en las afueras de Linz.
Altdorfer hizo mucho para que la escuela del Danubio fuese un paso adelante para ese tiempo. Podemos verlo en sus refinados dibujos de paisajes, realizados con plumas negras exhaustas, subrayados blancos y acuarelas, en papel marrón o gris-azul. Su uso de la luz en los paisajes era muy innovador, y él era un miniaturista de manuscritos de talento raro en la Alemania de su tiempo. Algunas de sus mejores estampas eran paisajes donde él combinaba grabados y xilografías en una sola pieza. En total realizó unos 93 grabados de madera, y entre ellos muchas xilografías, y 122 calcografías.
Fue también un ciudadano comprometido en Ratisbona, donde fue arquitecto oficial durante muchos años. Hoy la mayor parte de sus obras se encuentran en la Alte Pinakothek de Mónaco, pero también en la National Gallery de Londres.