Las Salas Rojas de los Nuevos Uffizi están dedicadas al siglo XVI. Agnolo Bronzino (1503 - 1572) es el protagonista de dos de ellas, la 64 y la 65. El artista toscano, que trabajó en el Renacimiento tardío, es considerado uno de los maestros del Manierismo italiano.
La sala 64 de la Galería de los Uffizi está dedicada al artista, y acoge pinturas de temas sagrados y profanos, incluyendo la famosa Sagrada Familia Panciatichi.
La sala 65 se llama "Bronzino y los Medici". Aquí se exponen algunos de los retratos que el artista creó para la familia Medici: lo de Eleonora de Toledo con su hijo Giovanni, lo del Gran Duque Cosimo I, los de Giovanni de' Medici y Bia (hija de Cosimo I), sino también lo del enano Morgante, famoso juglar que trabajó en la corte del Gran Duque.
Bronzino fue el retratista oficial en la corte de los Medici, desde aproximadamente 1540. La familia apreció mucho su arte. Él trabajó en el Palazzo Vecchio, donde - entre las diversas asignaciones - él decoró la capilla privada de la Gran Duquesa.
Luego realizó varios retratos, muchos todavía expuestos en los Uffizi. Inmortalizó incluso algunos miembros de los aliados de los Medici, como la familis Doria. Su trabajo fue apreciado también fuera de Florencia: él fue activo en Roma y Pesaro, donde trabajó para el Duque de Urbino.
Bronzino es uno de los protagonistas de la Galería de los Uffizi, no sólo por el número de obras expuestas, sino también por su valor y su importancia histórica y artística. El artista es considerado uno de los grandes Manieristas italianos: su maestro fue, de hecho, Pontormo.